la minirevoluciòn

El otro día, me preguntaba alguien por que estaban la gente tan inquieta , por que no las deja vivir, tan como estranguladas por el miedo, los nervios y la angustia, y por que esto le s ocurre a quienes tienen razones no tan objetivas para mirar con temor el porvenir, sino incluso a quienes teóricamente parecen tener el futuro substancialmente resuelto, pero que no están , por ello , menos expuestos a depresiones , a necesitar pastillas para dormir.
En las décadas pasadas se creyó en las revolucione y en la política. Pero hoy ¿quien cree que todo eso pueda a ser algo mas que poner leves parches o trasladar la inquietud de unas personas con otras o de unos temas a otros.
Para mi la única puerta de salida de la inquietud es la creación de la pequeña fraternidad, amar ser querido , luchar por que sean mas felices , quienes nos rodean en casa, vecindario u oficina.
Pero siempre preferiré una revolución soñada. Y, en todo caso estoy seguro de que la que propongo no lleva tras de si un rastro de sangre.

Publicado por Ariana Mendoza en 16:57